La Historia de Vida de Benicio

Hoy mi bebito cumple dos meses … Ya que fue la semana del prematuro les comparto algo que escribí …. CARTAS A BENICIO DOS MESES DE TU LLEGADA. Nada de la maternidad sucedió como yo había planeado, ni querido. Un embarazo interrumpido abruptamente. Hasta la semana 31 venia todo bárbaro, y de repente, a reposo, hay algo que está mal, y así sufrimos eco a eco, intentando que pasaran los dias, pero evitar lo mayor posible el tiempo en la neo, pero fue imposible, un dia, a las 19 hs estábamos en Pilar, haciendo una interconsulta, y el medico nos dijo: ¨Vengan ya al mater, estoy acá con la partera¨. Empecé a llorar y temblar, no queria que nazcas tan pronto, y menos asi, tan de golpe sin un día de pre aviso. Mi parto soñado, mi final de embarazo, tenerte en mis brazos horas despues de nacer, reconocerte la carita, que toda la gente te venga a visitar, y yo poder mostrarte, y todas esas expectativas se fueron al tacho. Y caimos al sanatorio con bolso en mano, y yo temblaba. Mi médico nos sentó y nos dijo: ¨Hoy vas a conocer a tu bebé y yo rompí en llanto. No estaba preparada. Faltaban 6 semanas para que puedas nacer, no quería la experiencia de la neo, no quería sufrir ni que sufras, lo que sabia que iba a pasar. No sabia ni como era una cesárea porque no me había ni informado, convencida que iba a ir a parto natural. No sabia lo que era la peridural, y estaba en pánico, acariciando la panza, tratando de darte la paz que yo no tenia. Papá estaba más tranquilo que yo, y decía mejor que nazca, es peor esta incertidumbre, de saber que algo anda mal y no sabemos que es. Yo quería que te quedes adentro mio. Pero no se pudo. Vinieron los medicos, intentaron explicarme y me dijeron que la operación duraba en total 8 minutos. Me llevaron sola, para ponerme la inyección y despues me acoste, y cuando ya habían arrancado, entro Papá todo vestido y me pregunto como estas? Agarrandome la mano, y yo le respondi, siento olor a quemado, y es mi propia carne. Rarisimo, era lo que se olía y mientras lo miraba a tu Papá, me dijeron: ¨Mirá ahí está. Bajaron la tela, y ahí estabas, lindo, perfectito, diminuto, no llorabas mucho, solo te quejabas apenas, y yo solo le decía a Papá: ¨Es muy lindo, es muy lindo ¨ eras perfecto. Y la partera me dijo al oido, que te iban a dejar sobre mi muy poco porque era dificil que regules la temperatura por ser tan prematuro. Así que mientras te acercaban a mi, te fuiste poniendo azul, te di un beso y te llevaron. Y por las próximas 12 horas no te pude ver. Estuviste atendido por mil medicos, y yo sufría el dolor de la cesarea, en el cuarto con la cuna vacía al lado. Hasta que a la mañana siguiente, sufriendo de dolor, me tuve que levantar, pedir una silla de ruedas e ir a verte. Solo necesitaba eso, me desperté como si hubiese sido todo un sueño, o una gran pesadilla. Llegue a la neo arrastrandome de dolor, y te vi, en tu incubadora, con los ojitos tapados, tubos por todos lados y sentí morir. Solo quería agarrarte, tocarte, y evitarte todo el dolor posible. Pero no se podía. Lo mejor era que ni siquiera te cante los primeros dias, y te hable poquito para no despertarte ni estimularte, demasiados tubos, y estabas ahí tranquilito, sedado. Se me partía el corazon. Creo que nunca había sufrido tanto como en esa situacion. Pero fuiste fuerte, valiente y te bancaste todo. Fueron 4 dias de estar entubado, tu vida en peligro, lejos nuestro y te la bancaste como un rey. Un torito como te deciamos. Los primeros dias, no habia avances, todo seguía igual y yo no podía ni tocarte, ni verte entero, con los ojitos tapados, quería conocerte la carita. Las patitas flaquitas. Solo pesaste 1,960 gramos. Finalmente fueron pasando los dias, y superaste todo en tiempo record. Según las enfermeras la primera noche casi no la superas, estuviste grave, con una hipertensión pulmonar, pero te la bancaste. Aunque para mi fue una eternidad, a los 5 días te extubaron, y necesitaste menos oxigeno, te sacaron la lámpara. Yo solo rezaba para que me dejaran agarrarte, pasó una semana entera, y recién el Miércoles 28 pude alzarte en mis brazos por primera vez. Sentí volver a respirar. Al fin podía darte algo más de amor. que solo tocarte con un dedo, y llorar frente a la incubadora sin consuelo. Llorabas sin sonido, porque no tenias fuerza en los pulmones, y yo te daba mi dedo para intentar consolarte, cantarte fue de las cosas mas dificiles, porque se me quebraba la voz cada vez que lo intentaba. Pero pensaba en recomponerme y pensar que era lo mejor para vos. Cada vez que me decían que me tenia que ir de la neo, eran lagrimas, de pensar que vos te dabas cuenta que tu Mamá no estaba con vos, que te había abandonado. Fueron días muy dificiles, y muy angustiantes, hasta que empezamos a ver progresos. Al 5to día te pusieron el zipap que era probar que tus pulmones empiecen a funcionar solitos, aunque con mucha ayuda externa. La sonda seguia alimentándote por boca. Y a los 2 días de eso, te sacaron el zipap, y solo quedo la famosa bigotera, que solo te daba un 30 % de oxigeno. Y ese día te tuve en brazos, y de ahí en adelante todos los dias. Y de a poco pudiste regular tu temperatura, saliste de la incubadora, y finalmente, no necesitabas más oxigeno, y nada más, solo quedaba que aprendas a comer, pero eras demasiado chiquito, costó pero finalmente un Sábado 8 de Octubre, te puse contra mi pecho y milagrosamente empezaste a comer… Y así siguió la mamadera, como suplemento. Y 3 días mas tarde, venia la doctora y me decía: te lo queres llevar hoy? Y yo con lagrimas de emoción le dije: obvio! Feliz de llevarte a casa un martes 11 de Octubre. Asustados que seas tan chiquito y tan vulnerable, te teníamos que tener aislado, lejos de la gente,y los germenes, casi no nos conocías, te teníamos q sacar de tu hábitat que era la neo, y darte todo el cariño posible para compensar los días que estuviste lejos nuestro. Fue dificil, es dificil no dormir, entender tus tiempos, tus llantos, no podía cambiarte el pañal porque llorabas desconsoladamente, me daba cuenta que eran recuerdos de la neo, seguramente porque te recordaba a pinchazos, sacadas de sangre, y otras cosas. Hasta que después de varios dias, de cantarte, y besarte mientras te cambiaba, pudiste entender que era yo, Mamá y que no te iba a hacer daño. Y te calmaste. Y después llegaron los cólicos, te retorcías de dolor, y yo me angustiaba por no saber como calmarte. Hoy ya tenes 2 meses. Aunque solo deberías tener 2 semanas. Sos un bebito tan lindo, agradezco a la vida que todo haya salido bien, y que estés sano con nosotros. Nada fue como lo planee, nada resulto ser de la forma que hubiese querido. Pero acá estás, mi querido y anhelado bebe, Benicio, dos años antes te pusimos el nombre, ya sabíamos que ibas a venir a cambiar nuestras vidas. Sos un bebito muy especial para todos los que te rodeamos, te vimos sufrir y atravesar obstaculos. Sos un bebe con mucha fuerza. Hoy pesas justo el doble que el día que naciste, y sos un bebito sano, con una carita perfecta. Me miras y me derrito. Amo calmarte con solo agarrarte en mis brazos y apretarte contra mi. Y escuchar como tu llanto, empieza a convertirse en paz. Fue muy dificil ser madre de un prematuro. Seguramente quedaran muchos traumas por resolver, pero si hay algo que me enseñaste en estos dos meses, es a no intentar planear todo porque NADA es como uno planea. A veces es mejor, a veces es peor, o a veces simplemente distinto. Hoy Benicio tiene un año!!!!! Tu Mamá.